El proyecto busca mejorar de manera significativa la conectividad y seguridad vial, reduciendo las actuales 40 curvas de retorno a 14, además de incorporar una ruta escénica que va a tener 5 miradores con servicios de despeje de nieve y de hielo.
Tras una extensa reunión el Subsecretario de Obras Públicas, Lucas Palacios, y el alcalde de la Municipalidad de Lo Barnechea, Felipe Guevara, anunciaron la creación de una mesa de trabajo para la Ruta a Farellones G21, la cual busca incorporar al proyecto las ideas, inquietudes y solicitudes de las distintas comunidades vinculadas al desarrollo de esta carretera.
Con el alcalde Felipe Guevara queremos hacer del proyecto de la Ruta hacia Farellones, el mejor proyecto posible. Desde ese punto de vista, han surgido inquietudes tanto de la gente que vive o que va frecuentemente al sector de Farellones, como también por de los ciclistas que utilizan la ruta. Ambos grupos nos interesan mucho y nuestra intención es poder darles una solución. Por esto, crearemos una mesa de trabajo con los grupos de interés, porque estos proyectos no se pueden hacer de espaldas a la ciudadanía, sino que al revés, hay que abrir las ventanas para que lleguen las buenas ideas, y poder incorporarlas en nuestro proyecto, dijo el Subsecretario de Obras Públicas, Lucas Palacios.
En tanto, el alcalde de Lo Barnechea, Felipe Guevara, comentó que hay coincidencia absoluta entre el Ministerio y la Municipalidad, en el sentido de que queremos una ruta segura para todos. Hoy tenemos accidentes con ciclistas en el camino y no queremos que eso siga ocurriendo. Por lo tanto, poder mejorar y trabajar con ellos el tema pasa a ser prioritario para nosotros. Primero hay que estudiar en qué consiste esta demanda, cuántos ciclistas son, hasta dónde suben, queremos saber el volumen de todo esto, para luego poder identificar a estas personas y trabajar con ellos en una mesa de trabajo.
El proyecto de la Ruta G 21 de Farellones busca mejorar de manera significativa la conectividad y seguridad vial desde Santiago hacia la Cordillera, tanto para los vehículos livianos, como para los ciclistas y camiones que transitan por la ruta.
Su entrada en funcionamiento, programada para el año 2028, permitirá facilitar el acceso y otorgar mayor seguridad a los miles de visitantes nacionales y extranjeros, y disminuirá considerablemente los tiempos de viaje, reduciéndolos desde las dos horas que se pueden demoran hoy los automovilistas en horario punta, a no más de 30 minutos en promedio.
La ruta considera una longitud de 30 km aproximadamente, y el proyecto busca reducir las actuales 40 curvas de retorno a 14, además de incorporar una ruta escénica que va a tener 5 miradores con servicios de despeje de nieve y de hielo.