Columna de opinión en La Tercera: El desafío de asegurar la gestión sostenible del agua

Fecha: 22 marzo, 2023

En Chile y como gobierno estamos comprometidos con la agenda del agua. El próximo mes se cumplirá un año desde que se promulgó el Código de Aguas, que define como interés público el resguardo del consumo humano y saneamiento, la preservación ecosistémica, la sustentabilidad acuífera y, en general, la promoción de un equilibrio entre eficiencia y seguridad en los usos productivos de las aguas.

Por Jessica López, Ministra de Obras Públicas y Maisa Rojas, Ministra del Medio Ambiente.

Hoy 22 de marzo conmemoramos el Día Mundial del Agua, fecha que nos lleva a reflexionar sobre cómo estamos gestionando los recursos hídricos, cuáles han sido los avances en este primer año de gobierno y sobre cómo enfrentar los desafíos de los próximos años, tomando en cuenta que, en un escenario de cambio climático, la disponibilidad y calidad de este bien es cada vez más complejo en Chile.

Este año participaremos como gobierno en la Cumbre del Agua de la ONU 2023, instancia donde los países presentaremos nuevos compromisos para acelerar el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 6 (ODS6), buscando asegurar la gestión sostenible del agua y el saneamiento. Se trata de una conferencia que se realiza después de 45 años, por lo que será una tremenda oportunidad para intercambiar experiencias y estrategias.

En Chile y como gobierno estamos comprometidos con la agenda del agua. El próximo mes se cumplirá un año desde que se promulgó el Código de Aguas, que define como interés público el resguardo del consumo humano y saneamiento, la preservación ecosistémica, la sustentabilidad acuífera y, en general, la promoción de un equilibrio entre eficiencia y seguridad en los usos productivos de las aguas. En las próximas semanas se remitirá a la Contraloría General de la República los reglamentos necesarios para la implementación del nuevo código, junto con recursos para facilitar esta tarea.

Ahora, en Nueva York, daremos otro paso adelante con nuevos compromisos para seguir avanzando en la seguridad hídrica para todos y todas. Comprometeremos recursos y medidas para asegurar el acceso universal y equitativo al agua potable, a un precio asequible, especialmente en las zonas rurales menos pobladas. Junto a esto, seguiremos trabajando con metas concretas en la calidad y el tratamiento de las aguas, a través de la regeneración y reutilización de aguas grises y tratadas, presentando un proyecto de ley que permita utilizar para el riego las aguas grises en actividades silvoagropecuarias y avanzando en el cambio de estándares de los emisarios submarinos.

También nos comprometeremos a seguir transparentando toda la información en materia de aguas, en especial, la relacionada con información ecosistémica a nivel de cuencas, calidad de aguas, eficiencia y gestión integrada del recurso hídrico, mediante el desarrollo de plataformas accesibles al público, muy en sintonía al estándar de Escazú.

Para un país con la diversidad territorial y climática de Chile es indispensable trabajar la seguridad hídrica y el ODS6 a nivel de cuencas. Por eso, queremos avanzar en dos grandes líneas complementarias: el desarrollo e implementación de planes estratégicos de recursos hídricos en cuencas y en un proyecto de ley que crea los consejos de cuenca como un componente esencial del sistema de gestión hídrica.

Los ministerios del Medio Ambiente y de Obras Públicas estamos trabajando de manera coordinada, con el fin de asegurar el consumo humano del agua y el cuidado ecosistémico, conscientes de que nuestras industrias también requieren de este recurso. Sabemos que hay industrias que ya están haciendo esfuerzos por reducir sus consumos y velaremos por que así lo sigan haciendo. Como gobierno ya hemos comprometido presupuesto para resguardar la seguridad hídrica y fiscalizar que se cumpla la priorización que mandata el Código de Aguas.

En esta semana en que conmemoramos el Día Mundial del Agua, los queremos invitar a ser parte de esta agenda, que requiere una nueva mirada y estrecha colaboración entre todos los actores, públicos y privados, con el fin de estar mejor preparados para el nuevo contexto que nos presenta el cambio climático con relación a este recurso estratégico para la vida de las personas y las comunidades.