La Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) y la Dirección General de Aguas (DGA) del Ministerio de Obras Públicas (MOP) suscribieron un convenio con 10 líneas de trabajo para fortalecer el trabajo en equipo y sinergia que hasta ahora han venido realizando en materia de fiscalización ambiental.
De esta forma, el Director General de Aguas, Rodrigo Sanhueza, sostuvo que “la DGA es un servicio público con competencias ambientales, tanto para la fiscalización y evaluación de proyectos, las que hemos reforzado a partir de la reforma al Código de Aguas de abril de 2022. Al mismo tiempo, hemos optimizado nuestros procesos de fiscalización para dar una respuesta más rápida a la ciudadanía y a los servicios públicos que nos piden fiscalizar potenciales infracciones al Código de Aguas. Este convenio viene a fortalecer el alcance del trabajo entre la DGA y la SMA, el cual busca robustecer la labor de fiscalización ambiental”.
Por su parte, la Superintendenta del Medio Ambiente, Marie Claude Plumer, destacó que “la actualización de este convenio refuerza aspectos del trabajo conjunto, como la mesa técnica SMA-DGA relevando el intercambio de conocimiento y criterios en temas sancionatorios y el uso de herramientas tecnológicas como la teledetección y monitoreo remoto, junto con formalizar el apoyo entre ambas instituciones para fiscalizar las normas secundarias de calidad”.
En materia de recursos hídricos, ambas instituciones convergen en el programa de fiscalización que fija la SMA en relación a los compromisos que deben cumplir los titulares de proyectos de acuerdo a sus Resoluciones de Calificación Ambiental, en las Normas Secundarias de Calidad Ambiental (NSCA) y en la elaboración de Programas de Medición y Control de la Calidad Ambiental del Agua (PMCCA).

Líneas de trabajo del convenio
Este convenio considera 10 líneas de trabajo. Entre ellas se establece la coordinación entre la SMA y la DGA en caso de situaciones de riesgo para el medioambiente, pudiendo actuar la DGA de forma inmediata y dictar las medidas necesarias para controlar el riesgo. Una vez atendida la situación se deberá informar a la SMA y remitir los antecedentes levantados en la fiscalización.
Además, el convenio establece la instalación de una mesa técnica que deberá elaborar herramientas de apoyo a la fiscalización, definir la forma y modo de comunicar los casos de especial relevancia ambiental asociados a Permisos Ambientales Sectoriales (PAS) y los criterios a considerar por ambos servicios para abordar las acciones que el titular de un proyecto debe cumplir en la Resolución de Calificación Ambiental durante la construcción y ejecución de éste.
Igualmente, la mesa deberá estudiar el uso de nuevas tecnologías para la fiscalización y sanción, explorando aplicaciones de inteligencia artificial para la detección temprana de desviaciones y el intercambio de experiencias y herramientas para el uso de imágenes satelitales, sensores remotos y plataformas geoespaciales en la supervisión de cuerpos de agua, obras hidráulicas y cumplimiento de resoluciones administrativas, entre otras funciones asignadas a esta instancia de trabajo colaborativo.
Otra línea de trabajo son las actividades de fiscalización ambiental subprogramadas con los correspondientes procedimientos para su ejecución. Estas tareas fiscalizadoras pueden ser inspecciones ambientales, exámenes de información y medición, muestreo y/o análisis de parámetros físicos, químicos o biológicos, o una combinación de dichas labores.
Entre otros aspectos, en materia de Normas Secundarias de Calidad Ambiental (NSCA), la DGA deberá continuar entregando a la SMA los antecedentes de los monitoreos que realiza en siete cuerpos de agua para verificar el cumplimiento de la normativa respectiva. Parte del acuerdo suscrito, considera además informar a la SMA cuando la DGA se pronuncie respecto a las descargas de contaminantes a aguas marinas y continentales superficiales y subterráneas. Adicionalmente, ambas partes quedan facultadas para difundir casos de especial relevancia producto del trabajo conjunto.



